Hace unos días, estuve en una visita guiada con los propietarios de una fábrica, y en uno de los momentos del tour explicaron que no estaban recibiendo tantas visitas como desearían.
En esas visitas, aparte de mostrar su marca, suele haber compras en la parte final de la misma por parte de los «turistas».
El detalle curioso fue que explicaron que la persona encargada de ese circuito no quería, «hacer visitas como churros» en el sentido de ser demasiado comercial.
Vender como churros
Existe una creencia curiosa y que he vivido en algunos de mis clientes, sobre todo cuando el ego o identidad personal está muy proyectada o unida al negocio:
El miedo de que su negocio se vuelva comercial, que pierda su esencia y valor, o que la autenticidad se vea comprometida si se muestra demasiado interés en vender o en promocionarse.
Existe cierta reticencia o vergüenza asociada a la venta, cultural o social, que han influido en la forma en que se percibe el acto de vender, la valoración de la modestia, el miedo al rechazo…
Si realmente deseas mantener cierto nivel de exclusividad y no quieres vender más, concreta y explica tu oferta exclusiva en términos de tiempo o unidades disponibles, pero no te autosabotees.
Churo, media manga, mangotero
En el juego del churro, al que muchos hemos jugado de niños, había que adivinar en que posición estaba el brazo del compañero.
No hagas que tus clientes, usuarios, pacientes o consumidores tengan que adivinar dónde estás y cómo puedes ayudarles.
La autenticidad reside en ti, y no te vuelves más auténtico por esconderte o hacer que tu oferta sea menos accesible.
«Imagina que has escrito un libro genialmente auténtico y que si se vende mucho tu obra se volverá comercial y perderá su esencia, eso es absurdo».
Tú escribes el contenido y defines tu obra o servicio.
Si lo que haces es bueno, ¿por qué no compartirlo?
Si tu producto es el mejor en su categoría,
¿por qué no permitir que más personas lo conozcan y se beneficien de él?
Lo bueno de vender
Vender es tener recursos adicionales, te brinda la libertad de escoger y ofrecer nuevas propuestas sin perder tu identidad.
Al vender más, generas ingresos que te permiten mantener tu negocio a largo plazo y tener estabilidad.
Además, te da la oportunidad de seguir haciendo lo que amas, al mismo tiempo que ofreces valor a tus clientes y seguidores.
Si estás interesado en vender tus productos o servicios, pero sientes cierta reticencia, reserva una sesión informativa conmigo.
Puedo ayudarte a tener relaciones genuinas con tus clientes y demostrarte cómo tu producto o servicio puede mejorar o hacer más agradables muchas vidas, incluida la tuya.
RAFEL LLEVAT .com · Executive Thinker